miércoles, 21 de diciembre de 2011

lass cinco y cuarto de la tarde

Solté los dedos de la guitarra, algún sitio de mis brazos  cogió el punto de apoyo o, de descanso, y, guitarra sofá y yo hicimos un bodegón de quietud y luz hermosa ventana en el techo mediante, azul y plantas era la tarde, la mujer del cuadro, se quedó tendida  mirando al frente.
"Esto no lo soluciono ahora, este ahora sólo lo soluciono desde más tarde". La frase era exacta pero de entrada ininteligible, aún así la hice caso, solté los dedos de la guitarra, mire al horizonte, me quedé en escucha.
Diría ahora, de lejos y porque por eso puedo poner las palabras, que en ondas concéntricas hacia mi, no sé si por la derecha levemente o mismísimo desde encima de mi cabeza, o por atrás como desde los riñones, a veces, algo en la nuca que me hizo mover levemente la cabeza, mi yo sería, era yo misma, yo en otro sitio o momento, el tiempo en cascada hacia atrás hasta desprecipitarse, al revés pero lo mismo que cuando caminamos mentalmente en el pasado hasta un hecho que se nos representa como el origen del momento que vivimos, así pero de mas adelante hacia atrás, yo misma llegué a mi y me cogí del sofá en el que estaba sentada y sin moverme a ningún lado, moví las posibilidades que concebía a esa hora, las cinco y cuarto de la tarde,  y me rescaté hacia un sitio mejor que el que imaginaba, a mi misma, yo misma desde el futuro, me solté en algún momento algunas frases, me parece  que sentí indicios de información en palabras por algún recoveco del aire, me dije por ejemplo, que todo lo incomprensible algún día se comprendería, atisbe que viviría una tarde parecida a  esta, no sé a través de qué tunel , y que no importaba mucho cómo salir de donde estaba, bastaba con querer salir, y que por eso yo misma, venía del futuro a por mí.
Una mujer rubia también habitaba más adelante. Oí palabras como chamanismo y plantas. Me hice una pregunta, por fin todo eso, ¿ lo vas a activar?